Salsa de chile colorado – Salsa de chile guajillo
English Aprende a hacer Salsa de Guajillo, también conocida como chile colorado, de una cocinera mexicana.
La salsa de guajillo es una base fundamental de la cocina mexicana. Desde enchiladas hasta menudo, incluso barbacoa, esta versátil salsa transforma cualquier platillo con solo algunos pequeños ajustes. Por ejemplo, para preparar enchiladas rojas, simplemente añade una ramita de canela a la salsa de guajillo, déjala hervir durante cinco minutos y ¡voilà! Tendrás una auténtica salsa para enchiladas rojas mexicanas que sabe como si hubiera salido directamente de la cocina de tu abuelita.

En mi ciudad natal de Chihuahua, el chile colorado es solo otro nombre para la salsa de guajillo. Si estás buscando platillos como cerdo o res en esta vibrante salsa roja, los llamamos cerdo en chile colorado o res en chile colorado, pero la salsa en sí se conoce simplemente como chile colorado.

Esta receta tradicional de salsa de guajillo, hecha con chiles guajillos secos (la forma seca del chile mirasol), recibe su nombre de ese impactante color rojo. Es una salsa de chile de picor medio, versátil, llena de sabor y un elemento básico en las recetas mexicanas.
Así que, después de esta breve introducción a la terminología culinaria mexicana, ¡manos a la obra! Te aseguro que, una vez que hagas esta salsa, querrás usarla en todo.

¿De qué está hecha la Salsa de Guajillo?
El chile colorado (también conocido como salsa de guajillo) se prepara con una mezcla de chiles guajillos secos, ajo, orégano, comino y sal. Algunas variaciones incluyen chiles mirasol o ancho para un toque único. Esta receta sigue el estilo del norte de México, especialmente de mi ciudad natal, Chihuahua.
¿Es picante la Salsa de Guajillo?
¡No generalmente! Los chiles guajillo tienen un sabor suave y rico. Si prefieres un toque más picante, puedes añadir algunos chiles mirasol o chiles de árbol.

Ingredientes para la Salsa de chile colorado
- 4 oz (110 gramos) de chiles guajillo secos
- 2 dientes de ajo
- 2 ½ tazas de agua (añade más para ajustar la consistencia)
- ½ cucharadita de comino
- 1 cucharadita de orégano mexicano
- 1 cucharadita de sal

Instrucciones
1. Tostar los chiles
Calienta un comal a fuego medio y coloca los guajillos encima. Déjalos tostar durante unos 12 segundos por cada lado. Asegúrate de retirarlos del comal tan pronto como empiecen a desprender su aroma. Este paso ayuda a liberar los aceites naturales de los chiles y realza el sabor de la receta, pero puedes omitirlo y aún así obtener una salsa deliciosa.

2. Hidratar los chiles
Hierve 4 tazas de agua, apaga el fuego y remoja los chiles guajillo durante 10 minutos o hasta que estén suaves (asegúrate de que el agua caliente cubra por completo los chiles secos). Este paso resalta su vibrante color rojo y les da una textura suave.


3. Licuar los chiles
Retira las ramas de los chiles y transfiere los guajillos a la licuadora. Añade 1 taza del agua de remojo, el ajo, el comino, el orégano y la sal. Licúa hasta obtener una mezcla suave.


4. Colar la salsa
Pasa la salsa licuada por un colador fino para eliminar las semillas y la piel. Este paso garantiza una consistencia aterciopelada.


5. Cocinar la salsa
Vierte la salsa colada en una olla, añade una taza adicional de agua y lleva a un hervor suave. Ajusta la sal y la cantidad de agua hasta alcanzar la consistencia deseada. Deja que hierva a fuego lento durante 5 minutos.

¿Qué puedo preparar con esta salsa?
Aquí tienes algunos de mis platillos favoritos que puedes hacer con esta salsa de chile colorado:
- Enchiladas Rojas
- Chilaquiles
- Menudo
- Pozole Rojo

Preguntas frecuentes sobre el chile colorado y la salsa de guajillo
1. ¿El chile colorado es lo mismo que la salsa de guajillo?
¡Sí! En muchas regiones, el chile colorado se refiere a una salsa hecha con chiles guajillo. Es conocida por su color rojo intenso y su sabor terroso, ligeramente ahumado.
2. ¿Cuál es la diferencia entre la salsa colorado y la salsa para enchiladas?
Ambas son salsas rojas, pero la salsa para enchiladas a menudo incluye canela y chile ancho para darle un toque ligeramente dulce, mientras que el chile colorado se basa únicamente en chiles. El sabor predominante del guajillo en el chile colorado lo hace una opción más rica y auténtica para platillos tradicionales mexicanos.
3. ¿El chile colorado es picante?
¡No usualmente! Los chiles guajillo son suaves, lo que hace que la salsa sea sabrosa pero no demasiado picante. Si te gusta lo picante, puedes añadir mirasol o chile de árbol para darle más intensidad.

4. ¿Por qué se llama chile colorado?
El nombre proviene de su color rojo brillante; “colorado” significa rojo en español. Este tono vibrante proviene de los chiles guajillo, el ingrediente estrella.
5. ¿Cuál es un buen sustituto del guajillo?
Si no tienes chiles guajillo, puedes sustituirlos por chiles mirasol. Los sabores son similares, aunque los chiles mirasol tienden a ser más picantes. Ajusta según tus preferencias.
6. ¿Cómo almacenar la salsa?
Guárdala en un recipiente hermético en el refrigerador. Puede durar hasta cinco días.
7. ¿Puedo congelar el chile colorado?
¡Sí, puedes! Yo suelo hacer una gran cantidad y congelarla en porciones pequeñas para usarla en mis recetas.
Ahora estás listo para preparar esta deliciosa salsa de guajillo, una verdadera joya de la cocina mexicana que le dará vida a tus platillos favoritos. ¡A disfrutar!
Otras recetas mexicanas que te encantarán:

Chile colorado
Ingredients
- 4 oz chile guajillo
- 2 dientes de ajo
- 2 1/2 tazas agua
- 1/2 cdta comino
- 1 cdta orégano
- 1 cdta sal
Instructions
- Calienta un comal a fuego medio y coloca los guajillos encima. Déjalos tostar durante unos 12 segundos por cada lado. Asegúrate de retirarlos del comal tan pronto como empiecen a desprender su aroma. Este paso ayuda a liberar los aceites naturales de los chiles y realza el sabor de la receta, pero puedes omitirlo y aún así obtener una salsa deliciosa.
- Hierve 4 tazas de agua, apaga el fuego y remoja los chiles guajillo durante 10 minutos o hasta que estén suaves (asegúrate de que el agua caliente cubra por completo los chiles secos). Este paso resalta su vibrante color rojo y les da una textura suave.
- Retira las ramas de los chiles y transfiere los guajillos a la licuadora. Añade 1 taza del agua de remojo, el ajo, el comino, el orégano y la sal. Licúa hasta obtener una mezcla suave.
- Pasa la salsa licuada por un colador fino para eliminar las semillas y la piel. Este paso garantiza una consistencia aterciopelada.
- Vierte la salsa colada en una olla, añade una taza adicional de agua y lleva a un hervor suave. Ajusta la sal y la cantidad de agua hasta alcanzar la consistencia deseada. Deja que hierva a fuego lento durante 5 minutos.